HOMBRE SIN ALMA

De tristeza constante,
de penas sempiternas
desolaciones miles y a granel.
Apesadumbrada figura,
entristecido y melancólico ser
de ojos lóbregos en abatido rostro,
desilusionado,
afligido,
avanza anónimo por el mundo.

La alegría rehuye de él
porque él no vive
(la verdad, apenas sobrevive)
es un Hombre sin Alma,
condenado a robar esencias de otros
para ensayar que siente,
para disimular que nació muerto.

Es un constructor de ánimas,
un inventor de espíritus
que usa ropajes
para vivir de incógnito,
para parecerse al resto
y en el mundo fingir que está vivo
y en la tierra fingir una vida alegre.

Es un Hombre sin Alma
maldito desde los huesos
maldito hasta su nombre,
incomunicado con la buena suerte,
abandonado en la búsqueda continua
de su alma perdida
que lo libere de esta sentencia;
paciente y porfiado hombre,
nunca ha descansado
en su lucha interminable
por ser un Hombre con Vida.

SEMÁFORO EN 3 FASES

Qué confusión para un novato peatón
que ve su cruce en verde
como lo ven los autos
que giran a la izquierda.
Cómo funcionan estos semáforos confusos
que regalan luces verdes a los caminantes
al mismo tiempo que deja a los autos
correr por el deteriorado pavimento.
Breves espacios de peligro
para el que quiera cruzar
(siempre que pueda)
eternos segundos de espera
en la siempre incómoda esquina,
en medio del implacable frío
que sólo el sur ha sabido fabricar.
Autos nuevos, autos viejos,
todos corren,
porque es tarde,
porque está oscuro,
porque hace frío,
porque el resto corre.
¿Cuánto tiempo pierde un peatón
en una esquina que contenga
un semáforo en 3 tiempos?
Micros salen, micros entran,
van y vienen,
casi todas llenas,
casi todas aceleran,
sin mirar a la chica
que disputa el lugar de privilegio
cuando obtiene el verde
en aquella fría esquina
dominada por el raro universo
del semáforo en 3 tiempos.