HOMBRE SIN ALMA

De tristeza constante,
de penas sempiternas
desolaciones miles y a granel.
Apesadumbrada figura,
entristecido y melancólico ser
de ojos lóbregos en abatido rostro,
desilusionado,
afligido,
avanza anónimo por el mundo.

La alegría rehuye de él
porque él no vive
(la verdad, apenas sobrevive)
es un Hombre sin Alma,
condenado a robar esencias de otros
para ensayar que siente,
para disimular que nació muerto.

Es un constructor de ánimas,
un inventor de espíritus
que usa ropajes
para vivir de incógnito,
para parecerse al resto
y en el mundo fingir que está vivo
y en la tierra fingir una vida alegre.

Es un Hombre sin Alma
maldito desde los huesos
maldito hasta su nombre,
incomunicado con la buena suerte,
abandonado en la búsqueda continua
de su alma perdida
que lo libere de esta sentencia;
paciente y porfiado hombre,
nunca ha descansado
en su lucha interminable
por ser un Hombre con Vida.